Un software vigués «predice» el 11-M
El programa del criminólogo Alberto Caballero estima de forma retrospectiva la alta probabilidad de ataque de tres sospechosos, cuándo podría ocurrir y la ubicación

Ofrenda floral en Atocha durante el homenaje a las víctimas del atentado celebrado el pasado día 11. / Ricardo Rubio/Europa Press
El software de prevención desarrollado por el criminólogo vigués Alberto Caballero ratifica su fiabilidad para advertir a las fuerzas de seguridad del riesgo de ataques terroristas. Un estudio retrospectivo realizado con los datos del 11-M en Madrid señala la alta probabilidad de que tres de los 21 condenados pasasen a la acción, entre ellos, el líder de la célula, además de precisar correctamente el tiempo y la ubicación en relación a otros dos terroristas.
El programa se basa en el análisis de los atentados ocurridos en todos los países de Occidente entre 2010 y 2020. En total, 60 ataques con 781 víctimas mortales. Y utiliza las informaciones que las autoridades ya conocían previamente sobre los terroristas involucrados, recopiladas a través de fuentes públicas, para elaborar 34 indicadores que determinan el riesgo de que un sospechoso pase a la acción.
La eficacia de este método, que constituye su tesis doctoral, es del 70%. Y Caballero quería probar qué resultados obtendría con un atentado ocurrido en otro periodo: «Este nuevo trabajo apoya la teoría que hay detrás. Y sería interesante probarlo con más casos».
El auto judicial incluyó a 21 condenados por el ataque terrorista de 2004, el peor en la historia de España. Caballero solo halló información manejada por las autoridades antes de esa fecha sobre cinco de ellos. El sistema arrojó un total de 17 indicadores de riesgo y la probabilidad de ataque para tres de ellos fue muy elevada, alrededor del 70%.
«Según la escala que utiliza la Inteligencia británica, a partir del 50% se considera que es probable que el sujeto atente. Un 70%, por tanto, sería una estimación prometedora. Indica que el sospechoso es de interés», apunta .

Probabilidad de atentar de Abdelmajid y posible ubicación, según el programa informático. / Alberto Caballero
Serhane Ben Abdelmajid, alias «el Tunecino», considerado el líder de la célula, obtiene una probabilidad de ataque del 80%. Allekema Lamari, «sobre el que el CNI insistió en que tenía que ser vigilado antes de los atentados», tiene un 72%. Y otra figura relevante, Jamal Zougan, un 70%.
«Uno de los resultados interesantes de este análisis es que el líder obtenga la mayor probabilidad porque es el que suele tener un mayor número de conexiones. Si realizas un seguimiento o pinchas su teléfono es más probable que puedas desarticular la célula que si lo haces con otro individuo más secundario», explica.
También son «prometedores» los datos sobre el tiempo y la ubicación. El software acierta en la estimación de la ventana en la que Lamari y Berraj llevarían a cabo un atentado –en algún momento durante los primeros cuatro meses a partir de noviembre de 2003– y también con dos de las cuatro áreas de actuación, dentro de un radio de 10 kilómetros.
«De cara al juicio, es interesante investigar a los sospechosos cuando están en la fase preparatoria, a punto de actuar, para obtener evidencias. El programa ofrece dos ventanas temporales. Una de cuatro meses y otra, posterior, de ocho meses. Y acierta en la primera en consonancia con los datos del primer estudio. La mayoría de atentados se producen en los primeros cuatro meses desde el inicio de la radicalización», indica Caballero.
«Podría haber tenido algún tipo de utilidad»
Analizar la información sobre los terroristas a posteriori es más sencillo, pero el programa de Caballero puede ser una valiosa herramienta para las agencias de inteligencia y los cuerpos de seguridad.
«Yo analizo todos los indicadores de forma conjunta y sabiendo a qué individuos pertenecen. Pero antes de los ataques probablemente fueron obtenidos por distintas agencias y recolectados lo largo de muchos años, lo que dificulta unir puntos. A veces se producen fallos a la hora de compartir información o un mismo sospechoso usa nombres falsos. Pueden surgir muchísimos problemas. Pero los resultados del software sugieren modestamente que podría haber tenido algún tipo de utilidad», señala.
El sistema está concebido además como base de datos para que se pueda actualizar con datos sobre nuevos individuos. «El modus operandi de los terroristas va cambiando. En 2004 prácticamente no se utilizaba internet, pero el sistema te permite seleccionar los indicadores que te interesan y los resultados fueron interesantes», señala.
- ¿Qué es la ‘extraña’ enfermedad que está padeciendo media España y afecta al estómago?
- Así es el sencillo test que deben hacerse todos los mayores de 50 años para detectar el cáncer de colon
- Hacienda lanza un aviso: queda prohibido seguir pagando en efectivo estas cantidades a partir de ahora, aunque sea fraccionado
- El dueño de Sargadelos urge a Inspección de Trabajo a cerrar la fábrica tras recibir una multa
- Colesterol alto: los alimentos que debes eliminar y los mejores para controlar los niveles
- El tren de mercancías que lleva más de un lustro completamente parado en Vilagarcía
- Adiós a un histórico de la hostelería
- La Xunta sube el sueldo a más de 2.000 funcionarios que antes eran laborales