Con máquinas capaces de ensamblar coches con Inteligencia Artificial, una empresa española de ingeniería ha conquistado el mercado chino, prioritario ahora mismo para ellos. Un mercado potencial de 1.300 millones de clientes en el que se ha posicionado esta empresa, presente en China desde 2014. Es el principal exportador español de queso al país asiático. Las exigencias sanitarias para vender allí son máximas. Otra de las dificultades para adentrarse en este mercado es cultural, aun así, con paciencia y sorbo a sorbo, una empresa española lleva 15 años exportando sus vinos a este mercado que representa el 5% de sus ventas internacionales. Es el objetivo de otra empresa de jamones, que después de cinco años acaba de conseguir la autorización para vender en China.