La entrega de premios Vigueses Distinguidos 2025 se convirtió en altavoz para recuperar valores que se creían imperturbables —la igualdad, la transición ecológica o la multilateralidad—, como hace 216 años el pueblo vigués recuperó su «villa» de la ocupación de las tropas napoleónicas. «A nosa resposta aos ataques seguirá sendo: fronte á adversidade, determinación; fronte á confrontación, unidade; e fronte á inxustiza, reconquista. Porque coa Reconquista, o pobo de Vigo recuperou algo que perdera, algo tan prezado como a liberdade» , exclamó el alcalde de Vigo, Abel Caballero Álvarez, para quien la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos resume esta «perigosa» negación de principios éticos y científicos «que nos orientan sobre a forma de progresar e respectar o futuro». Este fue solo uno de los mensajes que el alcalde Abel Caballero trasladó no solo a los 400 asistentes al Teatro García Barbón, sino a toda la ciudadanía. Y es que cada uno de los espectadores del acto representa a colectivos, gremios, asociaciones, grupos sociales o simplemente a vigueses, al encarnar unas mismas necesidades, carencias, preocupaciones, ilusiones y esperanzas. «Aquilo que dá significado á identidade das personas defínense nas cidades, defínense na proximidade», apremió el regidor. Y es que ser vigués es casi un estilo de vida. VIGO es Valor, es Igualdad, es Globalización y es Orgullo. «Vigo creouse a si mesma e logrou converterse na primeira cidade de Galicia a pesar da marxinación histórica que sufrimos», destacó Caballero. Palabras de todo menos vacías que el propio alcalde se encargó de argumentar, enumerando uno a uno, los agravios comparativos con otras urbes o localidades. «Lamentablemente, a Vigo negáronlle dereitos que outras cidades si teñen, infraestruturas de comunicación e referencias institucionais. A realidade é que a mellora do transporte ferroviario e por estrada segue sendo unha demanda permanente debido a antigas decisións erradas que lastraron o avance da cidade, obrigándonos a un maior esforzo», denunció Caballero, apelando a infraestructuras clave para el desarrollo de la ciudad como el «tren de Alta Velocidade Vigo-Madrid directo por Cerdedo, a nosa gran prioridade, negada por algúns, ou a autoestrada A-52 Vigo-Porriño en túnel. E facémolo desde o respecto ás persoas afectadas e mostrándolles o noso apoio». Frente a esta «marxinación histórica», Caballero ensalzó eventos como «Conxemar ou Navalia», «a actividade pesqueira» o «a produción de centos de miles de vehículos que serán desfrutados en todo o planeta». No olvidó tampoco la calidad de vida que ha sido posible en la ciudada gracias a las humanizaciones, escaleras y rampas mecánicas y las zonas verdes. La cultura; el cambio climático, con la nueva potabilizadora y depuradora como estandartes, y la educación tuvieron también un espacio destacado, elevando el programa del «Vigo en inglés» por el que miles de niños viajan a Reino Unido convirtiendo a la ciudad con el «mejor nivel de inglés de España». No podía dejar pasar Caballero la situación vivida respecto a la candidatura de Vigo como sede del Mundial 2030. «Seguiremos reclamando transparencia no proceso de designación das sedes», aseveró el mandatario local. Escoltado por los acordes de la Orquesta Vigo 430 y del Himno Galego que puso punto y final a la gala, Caballero se despidió recordando que a pesar de todos los retos, Vigo cuenta con «grandes aliados» que dan desde a Universidade hasta la creatividad y conocimiento de los ciudadanos. «Aos políticos que se opoñen a isto, queremos dicirlles que a cidade os volverá a castigar», reiteró el alcalde de Vigo, que zanjó su intervención aludiendo a «unidade». «Unidos en Vigo non hai nada que non poidamos conseguir. Agora xa temos o noso lugar no mundo e en todas partes está Vigo. Puxemos a Vigo no mapa e xa ninguén nos sacará del. Temos orgullo porque somos de Vigo. Agora coñecemos a nosa forza».