Una de cada cuatro viviendas que se encuentran en la actualidad en el mercado del alquiler en Arousa son propiedad de personas pensionistas. Esta es una de las conclusiones que arroja un estudio sobre la realidad socioeconómica del sector del arrendamiento en Galicia, publicado ayer por el Instituto Galego de Estatística. Según sus datos, el año pasado había 2.005 vecinos de O Salnés propietarios de viviendas en alquiler, más que el año anterior (1.872). La oficina gallega de estadística realizó este trabajo en colaboración con el Instituto Galego da Vivenda e o Solo para saber en manos de quienes están los pisos y casas arrendados, y quiénes los alquilan. Así, se estudian variables como la edad de inquilinos y arrendadores o su situación socioeconómica (si son trabajadores por cuenta ajena, desempleados, pensionistas...). En el caso de las siete grandes ciudades se aporta un abanico mayor de datos, pero en lo que respecta a los municipios de menos de 50.000 habitantes, el IGE analiza únicamente la situación de los propietarios. En Vilagarcía, había a 31 de diciembre pasado 765 vecinos con una vivienda arrendada (el año anterior eran unos pocos menos, 693). De estos 765 propietarios, 417 son trabajadores afiliados al régimen común de la Seguridad Social; 17 estaban en situación de desempleo; 213 eran pensionistas (lo que supone casi el 30 por ciento del total); y 118 tenían situaciones socioeconómicas diferentes, como por ejemplo por ser trabajadores por cuenta propia. La investigación del IGE y el Instituto Galego de Vivenda apunta igualmente que alcanzar el poder adquisitivo suficiente para disponer de una segunda residencia que pueda destinarse a alquiler lleva tiempo. Así, la edad media de los propietarios de Vilagarcía es de casi 59 años, y si se tiene en cuenta la edad media solo de los pensionistas, asciende a los 76 años. Los datos señalan asimismo que hay un número destacable de propietarios en Vilagarcía que tienen más de un piso o casa alquilados. En el conjunto de O Salnés, son 2.005 los propietarios. De estos, 1.102 trabajan como asalariados; 42 están en el paro; 569 son pensionistas; y 292 figuran en otros regímenes económicos. En el resto de la comarca de O Salnés, hay 226 propietarios en Cambados, 170 en O Grove; 42 en A Illa; 95 en Meaño; 82 en Meis; 86 en Ribadumia; 379 en Sanxenxo; y 160 en Vilanova. Las cifras crecieron en todas las localidades con respecto a 2023. El IGE no proporciona datos sobre el número de inquilinos disgregados por municipios de menos de 50.000 habitantes, pero a nivel provincial apunta que hay 60.328 personas físicas inquilinas. De ellas, la gran mayoría son afiliados a la Seguridad Social, 45.517, seguidos muy de lejos por los pensionistas, 5.507; los parados, 2.667, y los enmarcados en el grupo de «Resto», con 6.637. Pontevedra es la provincia gallega con el precio del alquiler más alto, lo que repercute, como es obvio, en el acceso a la vivienda de los inquilinos. Según el estudio «La situación del alquiler en Galicia», elaborado por «Alquiler Seguro», el esfuerzo de los inquilinos de la provincia se acerca al 35 por ciento y la tendencia en la presión del alquiler sigue al alza. En Vilagarcía, la Xunta acaba de anunciar un plan para la construcción de 350 viviendas.